Ya he aplicado la máxima con algunos libros que quería comentar y LOS NIÑOS DE PAJA de Bernardo Esquinca hubiera caído en esa categoría de no ser porque tiene un elemento que me pareció muy original e interesante.
Pero vamos por el principio:
El libro es una recopilación de relatos de horror cuya particularidad es que casi parecen gritar el nombre del autor en que están inspirados. Cuando vemos la portada y observamos la figura de un maíz junto al título de LOS NIÑOS DE PAJA inmediatamente nos remontamos al famoso cuento de Stephen King, LOS NIÑOS DEL MAIZ (que por cierto, tampoco es muy original en su planteamiento que digamos). Esto llevó a una de mis referencias a catalogar sus relatos como “cuentos sthepenkignianos”, pero realmente no es así. Por supuesto, es el tema y no el estilo el que configura esta visión. Sin embargo cuando leemos todo el libro nos damos cuenta de que la mayor parte de sus relatos cargan más con una marcada influencia de Jimmy Ballard que de Stephen King. De hecho hay un cuento que hacer referencia directa al apellido de este autor.
En LA VIDA SECRETA DE LOS INSECTOS, un forense debe indagar por si mismo las causas de la muerte de su esposa. Los insectos que se han desarrollado en su cuerpo dan pistas de un secreto más profundo que no será revelado.
En LA SEÑORA BALLARD ES LA SEÑORA BALLARD visitamos junto con un detective duro - muy a lo cine negro, - un elegante hotel, tras la pista de lo que se supone es una infidelidad. Sin embargo un secreto de extrañas perversiones parece esconderse tras las puertas.
En MIENTRAS SIGAN VOLANDO LOS AVIONES, la industria aeronáutica le debe mucho a un anónimo tipo que sueña con accidentes fatales.
En EL CORAZON MARINO, un psicólogo es perseguido por intrusiones cada vez menos sutiles de un extraño poder en su vida y de su relación con un centro psiquiátrico.
PABELLON 27 es el cuento bastante predecible sobre una chica obsesionada por el fuego e y con un padecimiento que no le permite sentir.
ESPANTAPAJAROS, este también muy en deuda con King y Lovecraft, visitamos el rancho de unos primos donde el espantapájaros es la figura que recibe las dadivas de un grupo de niños.
En EL DIOS DE LA PICINA (el único cuento del libro que realmente me gustó) un grupo de parejas yuppies se aleja a la tranquilidad de unos bongalows frente a la playa. La fraternal reunión comienza a volverse poco a poco en una bomba de tiempo que acabará manifestándose en un sacrificio brutal. Es fácil adivinar en este relato la influencia de Ballard, en especial de su novela RASCACIELOS, incluido un bouquet muy sutil a los mitos lovecrafianos a los que ha referencia el magnífico titulo de El Dios de la Piscina
En EL AMOR NO TIENE CURA, un hombre intenta por medio de la superchería recuperar a su esposa, mientras extraños signos ocultos se manifiestan en el edificio de departamentos donde vive.
Finalmente LOS NIÑOS DE PAJA, una novela corta donde una guerra entre dos pueblos en las montañas, uno de gringos viejos y el otro de niños terminará en una masacre digna de película del SCI FI Channel (que por cierto, las veo todas)
Esquinca puede dejar extrañados a muchos con sus finales anti climáticos y fuera de lugar. Parecen no tener nada que ver con el desarrollo del cuento o finalmente no terminan explicando nada. En sí, los relatos no están bien escritos, les falla el ritmo y en el caso de Los Niños de Paja los tiempos son muy forzados. Sin embargo, lo verdaderamente genial de estos relatos es que el terror jamás es mostrado. El miedo no está en lo que Esquinca describe en el relato, sino en todo aquello que jamás menciona. Son precisamente en las preguntas y las especulaciones que el lector se hace después de leer el relato donde se encuentra ese elemento que invita a temblar: ¿Qué? ¿Cómo? ¿Por qué? ¿Quién?
En la mayor parte de los relatos de Esquinca parece haber un poder o una fuerza sobrenatural que sutilmente va invadiendo algo más profundo que la vida de sus víctimas. Nunca lo describe, nunca lo menciona pero hace una referencia directa a él en el titulo de EL DIOS DE LA PISCINA (y que parece ser primo de EL-QUE-MARCHA-DETRÁS-DE-LAS-HILERAS). Un poder igual o tal vez el mismo parece manifestarse en EL CORAZON MARINO y EL ESPANTAPAJAROS. Tal vez por eso, la novela corta de Los Niños de Paja no es efectiva, porque es un referencial directo al cuento de King y eso demerita tremendamente la de por si poca fuerza que tiene el relato (la cosa que controla a los niños se hace llamar EL-QUE-NO-NOS-DESAMPARA-NI-DE-NOCHE-NI-DE-DIA). Vamos, es una novela corta sumamente amateur.
Me gustó la formula que desarrolla Esquinca en sus cuentos, pero a los lectores menos avezados, los relatos les parecerán faltos de lógica, absurdos o con finales inentendibles. Y, bueno, siendo sincero, es que no son muy buenos. Su idea potencial es más fuerte que el relato mismo.
Pero no importa. Los autores van aprendiendo y se van superando. Seguro llegará en el futuro material mucho mejor. Si hay algo que tiene este libro es que bajo cierta óptica, promete.
LOS NIÑOS DE PAJA
por Bernardo Esquinca
Ed. Almadía, México 2008